La comunicación es un recurso que permite a los individuos, expresar lo que sienten, para lograrlo es necesario contar con elementos mínimos para que se lleve a cabo: emisor, receptor, mensaje y código, si falta alguno entonces no será posible que se lleve a cabo el intercambio de información.
*El emisor y el receptor son los roles que se asumen por los individuos para que se de la comunicación.
*El mensaje, es lo que quiere expresar el emisor al receptor.
*El código puede ser verbal o no verbal.
Las interacciones entre personas son inevitables, ya que somos seres sociales que siempre transmitimos, o recibimos información, pero algo que resulta importante es el querer asumir alguno de estos roles para que sea posible la comunicación.
En una familia la convivencia se fortalece a través de la comunicación de los padres e hijos, en ocasiones resulta que el proceso presenta fallas imperceptibles por el momento, pero que relucen al momento de presentarse una situación de conflicto, pues resulta que alguna situación sencilla, se convierte en algo casi imposible de resolver, entonces se dice que la comunicación es negativa.
Por lo tanto la comunicación puede ser positiva o negativa, y dependerá de:
El código que se establezca, porque no debemos partir de supuestos, como “yo creí, es que pensé, supuse”, porque sin importar el código que se use, tiene que ser común para no confundirse.
Del interés mutuo para que se de la comunicación, porque resultaría pérdida de tiempo el intentar establecer un diálogo con alguien que no quiere escuchar.
La actitud positiva, receptiva al intercambio de información.
Cuando en una familia se reconoce que la comunicación es negativa, los padres deberán hacer los ajustes necesarios para que los hijos aprendan a través del ejemplo, ante la duda de lo expresado, es importante aclarar, para no dejar que los supuestos ronden en nuestra cabeza y si no estamos de acuerdo con el punto de vista del otro, debemos esperar a que termine, para exponer nuestra opinión, es importante evitar el rechazo desde el inicio porque cerraríamos la puerta para recibir información.
Entonces, ¿realmente existe la incomunicación en las relaciones humanas?
Yo considero que no existe la incomunicación, en todo caso cuando nos cerramos al intercambio de ideas, se puede decir que la comunicación es negativa y será la causa de no lograr acuerdos.
A continuación expongo un caso problema de comunicación familiar/conyugal y señalo la solución.
SITUACIÓN
La familia Gómez Almeida, conformada por papa José, mama Alejandra, hijo José Carlos de 10 años, e hija Alexandra de 2 años, tienen problemas con el hijo, que realiza actividades que alguno de los padres había ordenado no realizar.
PROBLEMA
La falta de acuerdos comunes para la crianza de los hijos.
POSIBLE SOLUCIÓN
Seguir los siguientes pasos:
Buscar el momento adecuado para sentarse y comentar lo que ocurre.
Determinar el tema central de discusión, quien inicia, cómo dar a conocer al otro que hay que detener el diálogo, porque se está llegando a una situación intolerable.
Evitar acusar y responsabilizar al otro de la situación.
Tomar acuerdos que los dos acepten y respeten.
Evaluar y dar seguimiento a lo acordado.
Precisar la fecha del siguiente diálogo.
Informar al hijo sobre lo acordado.
RESULTADO
Los padres asumieron una postura de respeto y respaldo total a las decisiones tomadas y el hijo se percato que ambos padres coincidían, logrando evitar conflictos familiares.
En cualquier centro educativo se pueden implementar acciones parecidas a las de la familia, por ejemplo:
La clave es determinar las metas y el código común.
La toma de acuerdos, con sanciones y gratificaciones.
Evaluar y dar seguimiento a lo acordado.
Establecer un calendario de reestructuración de acuerdos.
Informar a los estudiantes sobre lo acordado.
El problema que se puede presentar es no cumplirlo cabalmente, pues las situaciones de conflicto se presentan, primero cuando la comunicación es negativa y segundo cuando después de tomar acuerdos, estos no se cumplen por alguna de las partes o ambas.
TIPOS DE FAMILIAS
Con el paso del tiempo, la familia ha sufrido múltiples transformaciones, permitiendo que sea cada vez más difícil exponer una definición, ya que encontramos madres solteras, padres separados, parejas de bisexuales, homosexuales que se unen para adoptar un hijo, etc. Así encontramos muchos tipos de familias, que yo agruparé en dos: las tradiciones y no tradicionales.
Las familias tradicionales, son aquellas en las que se une un hombre y una mujer, si hay hijos, son resultado de esa relación o por adopción.
Las familias no tradicionales, son las que están formadas por parejas de dos individuos sin importar su género o condición sexual, los hijos casi siempre son resultado de una adopción.
Estos dos tipos de familias nucleares se pueden extender, al momento de incluir o relacionarse más estrechamente con familiares o amigos, pero ambas pueden ser funcionales o disfuncionales.
La familia funcional es estable y se muestra unida, los padres tienen claridad en su rol sabiendo el mundo que quieren dar y mostrar a sus hijos/as, lleno de metas y sueños. Les resulta fácil mantenerse unidos por lo tanto, los hijos/as crecen estables, seguros, confiados, les resulta fácil dar y recibir afecto y cuando adultos son activos y autónomos, capaces de expresar sus necesidades, por lo tanto, se sienten felices y con altos grados de madurez e independencia.
En la familia disfuncional faltan metas comunes, les es difícil mantenerse unidos resultando que, por su inestabilidad, los hijos crecen inseguros, desconfiados y temerosos, con gran dificultad para dar y recibir afecto, se vuelven adultos pasivos-dependientes, incapaces de expresar sus necesidades y por lo tanto frustrados y llenos de culpa y rencor por las hostilidades que no expresan y que interiorizan.
Todas las familias pueden vivir entablando comunicación negativa entre sus integrantes, esta se reflejará en la inestabilidad o disfuncionalidad, para salir de esa situación los padres tienen que mejorar los canales de comunicación, pues serán ellos en gran medida, los responsables de las características que desarrollen sus hijos.
La otra parte de responsabilidad recaerá en los hijos, pues cada uno es consciente, flexible, dinámico, único, con la capacidad para romper círculos viciosos y generar círculos virtuosos, es decir, definir el rumbo de su vida, por ejemplo: si un joven tiene un padre que se droga y golpea a la mamá, el tendrá que decidir si repite las conductas del padre o las modifica al momento de fundar su propia familia.
En nuestros días, es común observar conductas negativas entre los miembros de las familias, hay una población grande que vive en la disfuncionalidad, es urgente restablecer el tejido social, modificar el pensamiento de lo desechable, donde las relaciones se promueven como pasajeras y sin compromiso.
Hay que hacer un llamado a todos aquellos que viven la dicha de vivir en familia, para que sean ejemplo del valor del amor, para buscar la plenitud de la vida, para responsabilizarse de los propios actos y las repercusiones que desencadenaran en los demás.
Existe una propuesta llamada ecofamilia, que invita a modificar las estructuras familiares actuales, pero implica pasar de una familia nuclear con sus propias metas y códigos, a extenderla y relacionarse con más miembros de la familia y otras familias, para formar una sola familia global, todos con un fin común u holonómico, vivir en armonía primero de manera personal, después con los que lo rodean y finalmente con el entorno.
BIBLIOGRAFÍA:
FORMACIÓN PAREJA Y FAMILIA, Tomo 3. (2001). San Martín y Domínguez Editores, S. C. León, Guanajuato, México.
REFERENCIAS:
http://www.vidafamiliar.es/citas-frases-sobre-la-familia/
http://www.thefamilywatch.org/tfw/tfw-show-es.php
http://www.escolar.com/lengua/18comuni.htm
http://www.psicoactiva.com/tests/test2.htm
http://www.monografias.com/trabajos64/formas-comunicacion-humana/formas-comunicacion-humana2.shtml?monosearch
http://www.monografias.com/trabajos26/tipos-familia/tipos-familia.shtml
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